La piel de la manzana contiene niveles significativos de vitaminas y minerales que son más bajos o casi inexistentes en la pulpa de la manzana. De hecho, una manzana cruda con piel contiene hasta un 312 % más de vitamina K, un 70 % más de vitamina A, un 35 % más de calcio y potasio y un 30 % más de vitamina C que una manzana pelada.
Nuestras pieles de manzana proceden de las manzanas cultivadas en nuestra propiedad en La Garrotxa. Se tratan sin productos químicos, se seleccionan a mano y se secan a una temperatura inferior a 50 grados para preservar los beneficios naturales.
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Contiene fibra insoluble, vitamina C, vitamina A, potasio, calcio, ácido fólico, hierro y fósforo.
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Contiene el flavonoide quercetina, ayuda a proteger las células cerebrales del daño y previene la pérdida de memoria y también aumenta la concentración.
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Reduce el riesgo de glaucoma. Es bueno para la salud de tus ojos.
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Contiene una gran cantidad de antioxidantes.
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